¿Qué tan seguras son las transacciones en línea?

Para nadie es un secreto que la sociedad en la que vivimos hoy en día ha pasado por diversos cambios que nos han llevado a adaptarnos; y gran parte de estas modificaciones han sido a causa del veloz desarrollo tecnológico que se ha alcanzado en los últimos años. 

Si nos fijamos en el ámbito económico, podemos darnos cuenta que la forma en la que se hacen negocios actualmente es muy diferente a la que se solía practicar en el siglo pasado, pues a medida que transcurre el tiempo son más las opciones que las personas tienen para realizar sus transacciones bancarias, ya sea utilizando un terminal punto de venta o cualquier plataforma de pago online que les permita cancelar los servicios públicos o efectuar compras.

Si bien, son muchas las ventajas que estas opciones les ofrecen a los usuarios, como la comodidad, facilidad de compra y rapidez en las transacciones; la realidad es que también pueden llegar a tener riesgos importantes, pues a medida que aumenta el número de personas que hacen uso de estos métodos de comercio electrónico, también lo hacen los peligros a los que se exponen. Es por esta razón que resulta importante conocer cómo funcionan las transacciones en línea y la seguridad que garantizan; así como también detectar los posibles riesgos que pueden presentarse al realizar compras por internet.  

¿Cómo funcionan las transacciones en línea?

hacer transacciones online de forma segura

El primer paso para efectuar una transacción por internet es indicar aquello que deseas pagar, bien sea un servicio, compra o suscripción. Una vez indicado, necesitas introducir tus datos personales, así como incluir la información de tu tarjeta de crédito, débito o de cualquier otro método de pago que dispongas.  

Al hacer esto, tus datos no irán directamente al banco, ya que la gran mayoría de sitios web cuentan con pasarelas de pago o algún intermediario que haga uso de las normas “PCI DSS”. Lo que quiere decir que, los datos que ingresaste en un principio serán enviados al intermediario para que verifique la información proporcionada y valide que todo está en orden. Luego de la validación el intermediario procederá a contactarse con el banco al que está suscrito el usuario para efectuar la transacción.

Cuando la entidad bancaria compruebe que los datos son correctos y que el cliente dispone de fondos suficientes, esta volverá a comunicarse con el intermediario para confirmar la ejecución de la transacción. 

Por último, el mediador local le hará saber al ecommerce que la transacción fue autorizada por el banco, y es así como el negocio procede a entregar los productos o servicios correspondientes. 

Como verás es un procedimiento que implica el manejo de datos personales del cliente por varios miembros (sitio web, intermediario local e internacional y entidad bancaria), lo cual muchas veces nos lleva a pensar si las transacciones por internet son realmente seguras y confiables. Ya que tus datos podrían terminar en manos equivocadas, presentando un riesgo de robo de identidad u otro delito.

Es por ello que, se recomienda realizar transacciones en sistemas de ecommerce, siempre y cuando te enfoques en proteger tus datos personales y bancarios tanto como te sea posible. Para estos casos puedes vincular tu cuenta bancaria a tu teléfono celular, de manera que puedas estar pendiente de cada movimiento y detectar cualquier irregularidad en tu cuenta al instante. 

Otra medida preventiva que puedes considerar antes de realizar las transacciones es estudiar los sitios web en los que pretendes comprar, fíjate en las calificaciones de la página, los comentarios de los clientes y sus reseñas o realiza preguntas en el sitio, de esta manera puedes saber si se trata de un ecommerce confiable o si por el contrario es un fraude.

Principales riesgos a los que puedes estar expuesto al comprar por internet

Realizar transacciones online no siempre es fiable o del todo seguro, puesto que existen ciertos riesgos de los que podrías llegar a ser víctima si no tienes cuidado. Presta atención a la información que te mostraremos a continuación, pues son las tácticas más comunes que los estafadores suelen practicar.

Keyloggers

Este procedimiento se realiza especialmente mientras el usuario efectúa un pago en línea. Los keyloggers se dedican a hacer un detallado seguimiento de sus víctimas y registrar cada movimiento que ejecuta el usuario, incluso son capaces de saber cada tecla que pulsa la persona cuando ingresa los datos de su tarjeta, sin que este llegue a notarlo. 

Para poner en práctica su plan, los keyloggers hacen uso de un software o hardware que les permitan mantenerse invisibles, mientras graban todo lo que el usuario escribe en el teclado y dicha información la transfieren y almacenan en otra ubicación para luego sacar beneficios de ella. 

Este tipo de fraude es uno de los más riesgosos, ya que la víctima puede compartirle su información al ciberdelincuente mientras realiza una transferencia online sin siquiera sospecharlo. Mayormente esta práctica la hacen con fines delictivos, lo que posiciona a los keyloggers como un spyware malicioso utilizado para captar información confidencial y financiera para emplearla en explotación criminal.

Phishing

También conocido como suplantación de identidad, el phishing representa uno de los fraudes más frecuentes a la hora de hacer transacciones en línea. Este método de estafa consiste en hacerse pasar por una persona o entidad “legítima” con el objetivo de obtener información confidencial del usuario, tal información puede ser datos de la cuenta bancaria, números de tarjetas de crédito, contraseñas, entre otros. 

Usualmente los hackers que practican esta actividad se comunican con sus víctimas por medio del correo electrónico, invitándolas a que accedan al sitio web de una entidad falsa, para que de esta manera puedan robar cualquier dato sensible del usuario. Por lo general los phisher, como se les suele llamar, se hacen pasar por sitios de ecommerce o entidades bancarias. Si deseas saber más información sobre este tipo de estafa, puedes echarle un ojo a este post en el que profundizamos un poco más sobre el tema.

Gastos ocultos

Otro riesgo que suele ocurrir al realizar transacciones online son los costes ocultos que aparecen. De hecho, según estadísticas oficiales, una de cada dos personas que abandonan una compra por internet lo hace por los cobros adicionales que se agregan al momento de concretar la compra. 

Los costes ocultos hacen referencia a gastos que aumentan el precio final de un producto o servicio sin que siquiera notificarle al usuario. Esto se puede dar en gastos de aduanas, envío, gestión o comisiones en el método de pago seleccionado; siendo una forma de engañar a los consumidores en línea.  

Pérdidas


En el momento en el que el usuario paga un servicio o compra en plataformas de pago online en México o en cualquier parte del mundo, se ve en la necesidad de proporcionar sus datos personales e información bancaria, la cual se encuentra expuesta a diferentes riesgos de pérdidas, entre ellas las siguientes:

Pérdida de integridad de datos. Cabe la posibilidad de que el ciberdelincuente pueda modificar o borrar tu información personal.  

Pérdida de privacidad de datos. Al navegar por internet para realizar transacciones se debe proveer el acceso y manejo de la información personal del usuario a terceros, como es el caso de los intermediarios y puede existir la posibilidad de que la información sea compartida a individuos no autorizados, quienes se aprovechen de esto para realizar estafas.  

Pérdida del servicio. Las acciones del estafador también pueden llegar a ocasionar interrupciones en el servicio.

Pérdida de control. Debes saber que, una vez que proporcionas tus datos no tienes total seguridad de poseer el control sobre ellos, pues la información que se suministra a internet queda en la red.

Deja un comentario